Ingredientes
Para la masa:
600g de harina sin T.A.A.C , 200g de manteca , 1 huevo , 1 cucharadita de sal , 1 taza de leche
Para el relleno:
3 zapallitos verdes redondos , 1 cebolla de verdeo , ½ pimiento rojo y ½ amarillo , 2 claras , 1 huevo entero , 1 cucharada de aceite de oliva , Sal , pimienta , orégano , provenzal , 2 fetas jamón cocido , c/n queso barra
Empecemos..
Harina sin T.A.A.C: Es una de las principales harinas que se utiliza como sustitutivo de la harina de trigo. Es un tipo de harina rica en minerales, hidratos de carbono y vitaminas B, E y A
MANTECA (margarina): contiene Omega 6 , Omega 3 y es rica en vitamina D. También tiene una gran cantidad de vitamina k (por c/100g de este alimento tiene 93ug de ésta vitamina. Aporta hierro , proteínas, calcio , potasio , yodo
, zinc , magnesio y fósforo. Su aporte calórico es de 722Kcal/100g
HUEVOS: El huevo se divide en 2 partes: La yema, es la tercera parte del huevo y porción de color amarillo. Se compone principalmente de grasas, proteínas, vitaminas y minerales.
La intensidad de su color dependerá del alimento (granos y alfalfa) que consume la gallina.
Una yema nos brinda 60 calorías y aporta grasas saludables.
La clara, de textura viscosa y transparente, está formada en un 90% de agua, el resto lo constituyen las proteínas (ovoalbúmina, la más abundante) y vitaminas. La clara es el único alimento que aporta proteínas sin grasa.
Una clara de huevo aporta 17 calorías y 7 gramos de proteína
SAL: por cada 100g de sal , contiene: Sodio: 38850 mg, Calcio: 29 mg, Hierro: 0.3mg, Fósforo: 8 mg, Magnesio: 1 mg
LECHE: Se compone sobre todo de agua, lactosa, grasa y proteínas. En el caso de estas últimas, son muy completas ya que cuentan con ocho aminoácidos esenciales con unas proporciones adecuadas, mientras que la grasa se transforma en triglicéridos, con más de 50 tipos de ácidos grasos.
En lo referente a la lactosa, es el azúcar principal de la leche de la mayoría de mamíferos, mientras que en cuanto a los minerales, cuenta con la mayoría de los necesarios por el organismo, salvo el hierro, cobre y manganeso.
Por lo tanto, esto nos sirve para explicar que la leche es una gran fuente de calcio, vitamina A y vitaminas del complejo B, proteínas, fósforo, además de cobre, ácido nicotínico, vitamina C y D y hierro.
LOS ZAPALLITOS: están mayoritariamente compuestos por agua, por lo que favorecen la eliminación de toxinas del organismo, pero además su consumo aporta grandes nutrientes El zapallito es una hortaliza que está compuesto principalmente por agua, tiene un bajo aporte calórico pero es muy rico en nutrientes.
Es una gran fuente de vitaminas A, C, E y del complejo B, minerales como potasio, sodio, hierro, calcio y fósforo, ácido fólico, y fibra.
LA CEBOLLITA DE VERDEO: es rica en minerales y oligoelementos (calcio, magnesio, cloro, cobalto, cobre, hierro, fósforo, yodo, níquel, potasio, silicio, cinc, azufre y bromo); y también en vitamina A
contiene esencias volátiles sulfurosas que le confieren su sabor picante tan característico; uno de esos componentes se disuelve con rapidez en agua y produce ácido sulfúrico, de ahí que nos haga saltar las lágrimas cuando la cortamos.
PIMIENTO AMARILLO Y PIMIENTO MORRON: Son ricos en vitamina C vitamina A, y además poseen vitamina E, vitaminas B6, B3, B2, B1 y ácido fólico. Entre los minerales que contienen los distintas variedades de pimientos se destacan el potasio en mayor proporción seguido por calcio, fósforo y magnesio. Tienen una buena cantidad de hidratos de carbono y una gran concentración de carotenos (750mg /100 g).
El pimiento tiene un gran poder antioxidante, es bajo en calorías (19 kcal/100 g) y también es muy rico en fibra.
ACEITE DE OLIVA: En primer lugar, debemos señalar como nutrientes del aceite de oliva los ácidos grasos esenciales, entre los cuales cabe destacar los siguientes:
• Ácido oleico: Este nutriente del aceite de oliva es un tipo de grasa que ayuda a reducir la posibilidad de padecer enfermedades cardiovasculares. En concreto, el ácido oleico compone entre el 63 % y el 73 % del aceite de oliva.
• Ácido palmítico: Este tipo de ácido graso lo encontramos en la carne, lácteos y en casi todos los alimentos que contienen grasas, así como en algunos aceites. Se caracteriza por su gran poder antioxidante, además de tener un alto contenido de vitaminas E y A. También nos ayuda a tener una correcta circulación sanguínea. Este ácido compone entre el 7 por ciento y el 17 por ciento del aceite de oliva.
• Ácido linoleico: Se trata de un ácido graso poliinsaturado. Entre sus funciones más características destacan el hecho de que ayuda a disminuir la grasa corporal, además, aumenta la masa muscular, tiene efectos protectores contra algunos tumores cancerígenos y ayuda a luchar contra la diabetes. Este ácido, linoleico, constituye el 10 % del aceite de oliva.
• Ácido Esteárico: Este ácido se encuentra presente en la mayoría de aceites y grasas animales y vegetales. Se trata de una sustancia con múltiples posibilidades, funciones y aplicaciones. Tiene una gran importancia en la industria farmacéutica. En el aceite de oliva su presencia es del 1.5 % y 5%.
A parte de los ácidos grasos señalados, otros nutrientes del aceite de oliva igual de importantes, especialmente en el caso del aceite de oliva virgen extra, es el alto contenido en vitamina E.
PIMIENTA BLANCA MOLIDA: Esta pimienta ayuda a mejorar las digestiones gracias a su capacidad para estimular el ácido clorhídrico y otros jugos gástricos. Además, gracias a sus efectos carminativos, previene la aparición de gases, ayuda a su eliminación y combate la hinchazón de vientre y las flatulencias. La pimienta blanca también contiene altos niveles de fibra dietética, muy beneficiosa para regular el tránsito intestinal, combatir el estreñimiento, contribuir a la expulsión de colesterol y controlar la obesidad. No menos importantes son sus efectos diaforéticos, con grandes beneficios diuréticos. Así, estimulan la sudoración, la micción y la eliminación de toxinas mediante la orina y el sudor. Gracias a ello dificulta la formación de cálculos renales.
La pimienta blanca molida también es rica en calcio, hierro, potasio, proteínas, yodo, zinc, magnesio y vitaminas de los grupos A, B, C, D y K.
ORÉGANO: Con una pequeña cucharadita de orégano seco que agregamos a la comida sólo adicionamos 15 calorías, pero obtenemos 80 mg de calcio, 13 mg de magnesio, 83 mg de potasio, 10 mg de fósforo, 14 mg de ácido fólico, 205.6 mg de carotenos con acción antioxidante y 34 mg de vitamina A
JAMON COCIDO: Alto contenido de proteínas. Fuente de fósforo. Fuente de hierro. Fuente de zinc. Alto contenido de vitamina B1. Fuente de vitamina B2.Alto contenido en vitamina B3. Fuente de vitamina B6.
QUESO BARRA: contiene..
Proteínas
El queso contiene proteínas de alto valor biológico, es decir, son del mismo tipo que las de las carnes rojas, que ayudan a formar, reparar y mantener los tejidos del cuerpo. Respecto a las proteínas que tiene cada tipo de queso, los quesos frescos contienen menos que los curados. En cualquier caso, la cantidad de proteínas que aporta el queso es superior a las de su materia prima, la leche. Si nos fijamos en la leche con la que se compone el queso, la leche de cabra tiene más proteínas que la de la vaca.
Calcio
El calcio es uno de los minerales más importantes para el cuerpo humano. Ayuda a formar y mantener los dientes y los huesos sanos, pero también es esencial para el funcionamiento del sistema nervioso y muscular. Además, el calcio ayuda a que la sangre circule a través de los vasos sanguíneos y a liberar hormonas y enzimas que influyen en casi todas las funciones del organismo. La cantidad diaria de calcio que necesita una persona depende de su edad. Un adulto sano requiere unos 1000 mg. al día, cantidad que aumenta en las personas mayores y en adolescentes y mujeres embarazadas. El queso es uno de los alimentos con mayor concentración de calcio que existen. Una porción de 100 gramos de queso equivale al requerimiento diario de una persona adulta. Por eso es tan importante que el queso esté presente en la dieta de los niños, para su correcto crecimiento.
Vitaminas
El queso es un alimento rico en vitaminas A y D, ambas vitaminas ayudan al cuerpo a absorber el calcio y a mantener los huesos y los dientes sanos. El queso también es rico en vitaminas del grupo B, entre las que destaca la vitamina B12, la B9 (ácido fólico), la B1 (tiamina) o la B2 (riboflavina).
Grasas
Las grasas que contiene el queso son de origen animal, conocidas como grasas saturadas. Son grasas que debemos evitar si padecemos algún tipo de enfermedad cardiovascular. En estos casos, debemos decantarnos por quesos frescos desnatados tipo queso de Burgos.